En este dibujo fruto de su imaginación, pintó 12 niños, 12 camas, 12 lavabos, un cuarto de música, otro de inventos, un gran comedor y una piscina. Una bruja y por supuesto, en París.
Una constante en todos sus dibujos es la delgadez de sus personajes.
A la madrastra de Cenicienta, la dejó en la mitad de su peso.
Le atrae todo lo relacionado con los inventos. Probetas, esencias, transformaciones, pócimas,......
En sus juegos inventa cascos que ayudan a pensar, máquinas del todo tipo, brebajes y un sinfín de cosas mas. Sería feliz en un laboratorio.
En cuanto a las proporciones, dibuja personajes finitos y pequeñitos normalmente, en estancias amplias de techos altos. En este caso con retratos espectaculares. Y es que para él, la vida podría transcurrir siempre en palacios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario!